Emilio Gutiérrez Caba: «‘Copenhague’ ha sido un reencuentro muy feliz con Carlos Hipólito»


Emilio Gutiérrez Caba protagoniza junto a Carlos Hipólito y Malena Gutiérrez la obra de teatro ‘Copenhague’, que narra el encuentro que tuvo lugar en 1941 en la capital de Dinamarca entre el gran científico danés Niels Bohr y su ex alumno Werner Heisenberg, enemigos por la situación de sus dos países durante la Segunda Guerra Mundial. Maestro y discípulo se enfrentan al problema ético del uso de los avances en física para el desarrollo de armamento nuclear.

Le pedimos a Emilio Gutiérrez Caba que nos hable sobre la obra, que después del verano saldrá de gira y su elenco se alojará en varios hoteles de Eurostars Hotel Company, como el Exe Puerta de Burgos 4*, Exe Málaga Museos 3* o Exe Ciudad de Córdoba 4*.

EUROSTARS HOTELS.- ¿Qué se sabe del encuentro histórico entre el profesor Niels Bohr y su ex alumno Werner Heisenberg, y qué parte de esa realidad se refleja en la obra?

EMILIO GUTIÉRREZ CABA.- En realidad no se sabe nada concreto, sólo que hablaron ese día  y de esa conversación cada uno da una visión muy distinta sobre el contenido. Después de aquel momento no se volvieron a ver las caras nunca más, no hay ningún documento sobre lo que se habló en esa conversación.

E.H.- ¿Sirvió su encuentro para evitar que Alemania fabricase la bomba atómica en la II Guerra Mundial?

E.G.C.- Eso entra dentro del campo de la hipótesis, lo único que se sabe es que tanto Bohr como Heisenberg dieron una versión totalmente distinta, y en lo que se juega la obra es en las distintas versiones. Pero no se sabe si eso habría evitado la bomba atómica. Heisenberg defendió ese punto, dijo que no había resuelto todas las ecuaciones para hacerla.

E.H. – ¿Cómo es la relación entre ambos personajes?

E.G.C.- En la obra la relación no es solo un hecho histórico, hay una relación afectuosa, profesor-alumno, padre-hijo. Una relación rota por los intereses militares o políticos de la Guerra Mundial, lo que hizo que se rompieran los lazos afectuosos entre ellos.

E.H.- ¿Qué argumentos esgrimen a favor y en contra de utilizar los avances de la física para ganar la guerra?

E.G.C. En la obra los dos coinciden en que la utilización de la fisión nuclear en la fabricación de armas es algo en lo que los científicos deben responder frente a los militares. No hay nada real en cuanto a lo que dijeron. La obra plantea las hipótesis que el dramaturgo, Michael Frayn, cree que pudieron ocurrir.

E.H. – Se dice que después de ese encuentro, maestro y alumno no se volvieron a hablar. ¿En la obra su relación se tensa según avanza la conversación?

E.G.C.– Claro. La obra se centra en la amistad que hay entre ellos, entre el matrimonio Heisenberg y Bohr.

E.H.- ¿Cómo es para usted trabajar con Carlos Hipólito?

E.G.C.– Yo a Carlos le conocí hace muchos años, en el 91, cuando hicimos juntos ‘La sospechosa’ en un año absolutamente maravilloso para los dos. Para él significó su asentamiento como actor, y para mí pasar un año de paz. No habíamos vuelto a coincidir en todos estos años, y ha sido un reencuentro muy feliz, y además dirigidos por Claudio Tolcachir, un director muy generoso.

Copenhague
Obra de teatro ‘Copenhague’

Por: Elena Jorreto.