¿Persona u objeto? Lo inerte cobra vida
¿Cómo lo inanimado se vuele animado? ¿Cómo establece el hombre una relación inusual o íntima con los objetos? Un grupo de antropólogos se han centrado en estos temas para la exposición inaugurada el pasado 26 de enero en París.
PERSONA Extrañamente Humanos es una muestra que a través de 200 artículos procedentes de todo el mundo, pretende enseñar como a lo largo del tiempo diferentes culturas han incorporando la idea de humanidad a objetos inanimados. Aborda temas como en antropomorfismo, la robótica, el chamanismo y los cultos cotidianos.
Enlazando diferentes materias del arte, la religión, la ciencia y la antropología, la muestra propone ejemplos de estos elementos introducidos en la vida cotidiana: hablarle a tu móvil como si fuera un amigo cercano, venerar objetos inanimados o creer en presencias no materiales. Un niño que muestra amor por su peluche o un adulto que maldice al ordenador por su mal funcionamiento, no se alejan de un sacerdote tribal que hace un ritual de llamado de espíritus.
La muestra se expone en el Musée du Quai Branly-Jacques Chirac, en París. Un espacio donde se puede encontrar piezas del Museo Nacional de Artes de ífrica y de Oceanía y las del laboratorio de etnología en el Museo del Hombre. La institución cultural por un espacio más de 39.000 m² a la exposición de obras representativas de ífrica, América, artes y culturas de Asia y Oceanía, y por otra parte dispone de una sección temática de más de 750 m² basada en cuestiones universales existenciales.
La exposición se podrá visitar hasta el 13 de noviembre de 2016.