José Luis Pérez: «Espejismos es un viaje con la mirada más pendiente del suelo que del cielo»

José Luis Pérez (A Coruña, 1957) descubrió la fotografía a los 16 años. Desde entonces, el ejemplo de maestros como Henri Cartier-Bresson lo han convertido en un apasionado de este arte, que practica pegado al terreno. Afincado en Gijón desde hace 20 años, José Luis disfruta retratando en blanco y negro detalles arquitectónicos de las ciudades. Su serie «Espejismos» contiene 25 imágenes de edificios y objetos reflejados en el pavimento mojado de Gijón, que generan una ilusión óptica al invertir el cielo y la tierra. La muestra se inaugura el jueves 12 de septiembre a las 17.00h en el Eurostars Das Letras Hotel 5* de Lisboa, y se podrá visitar hasta el 14 de noviembre.
¿Cuándo comenzó tu afición por la fotografía?
En la adolescencia me aficioné al alpinismo y paralelamente surgió mi interés por la fotografía. Lo que al principio fue una forma de capturar paisajes y vivencias se fue ampliando con otros motivos: el retrato, la arquitectura, la fotografía de calle…
¿Podrías describirnos un poco el tipo de obras que formarán parte de la exposición?
Todas las imágenes están hechas en espacios públicos. Son instantáneas surgidas del deambular por calles y plazas buscando el lugar y el instante preciso, la imagen que sorprende. Aquí debería citar la influencia de Heri Cartier-Bresson y Robert Frank, entre otros. Para este tipo de fotografías suelo servirme del blanco y negro porque les proporciona mayor fuerza expresiva. En este aspecto le debo mucho a Ansel Adams y a su Sistema de Zonas.
¿Cuál es la temática que mueve tu obra, su hilo conductor?
Puede describirse como un paseo por la ciudad a través de sus reflejos. Es un viaje diferente, con la mirada atenta, más pendiente del suelo que del cielo. Además se muestra de un modo distinto, tan irreal como la imagen que de nosotros mismos devuelve el espejo. De ahí el título de la exposición, «Espejismos». Una imagen que nunca se revelaría si no fuera por la fotografía.
¿Qué te gustaría transmitir con tu obra?
¿En una palabra? Placer. Que quien la contemple goce con las imágenes expuestas y disfrute interpretándolas. Hay mucho de juego en esta exposición.
En muchas de tus obras hay bicicletas. ¿Qué simbolizan?
Mi afición por las bicicletas viene de lejos; no exagero, he pedaleado miles de kilómetros sobre ellas. Me parece una máquina perfecta, estética y funcionalmente. Que algo tan sencillo en su diseño permita viajar tan lejos y tan fácilmente es extraordinario, casi mágico. Un gran invento.
«Espejismos» es tu primera serie expuesta. ¿Tienes nuevos proyectos en mente?
Sí, siempre tengo varias ideas rondando en la cabeza. Les doy vueltas y vueltas hasta que, con suerte, alguna de ellas cristaliza en una colección de fotografías. Para mí es la parte más difícil de la creación artística. Actualmente trabajo en una serie formada por pareidolias -imágenes en las que reconocemos formas o figuras que en realidad no existen-, y tengo casi decidida otra de retratos. Además continúo mirando hacia el suelo cada vez que salgo de casa.
¿Qué te atrae de exponer en Lisboa, en el Eurostars Das Letras Hotel 5*?
Lisboa es una de las ciudades por las que siento mayor cariño. Todavía recuerdo el disgusto que me causó el incendio del Chiado en 1988 poco después de haber estado allí. Regresar a esta ciudad de la mano de la cadena Eurostars Hotels y dar a conocer mi trabajo en sus instalaciones es una gran satisfacción para mí.