Arte, vanguardia, guerra y dolor se citan en Madrid
La verdad del arte, el horror de la guerra y el desgarro del dolor se dan cita en Madrid, gracias a una enorme exposición pictórica que reúne más de doscientas obras de artistas europeos realizadas durante la I Guerra Mundial. La exposición 1914: la vanguardia y la Gran Guerra está dividida en dos espacios, el Museo Thyssen-Bornemisza y la Fundación Caja Madrid.
La Gran Guerra cambió, no sólo el curso de la historia, sino sobre todo la concepción que el hombre tenía de sí mismo. Y el mundo del arte no fue ajeno a toda esa revolución de las conciencias que supuso el horror de la I Guerra Mundial. De hecho, los artistas fueron quizá los primeros que percibieron todo el dolor que estaba apunto de estallar, porque desde principios de siglo, mientras Europa disfrutaba de la autocomplacencia, el mundo del arte ya mostraba -como se aprecia en la exposición- una visión apocalíptica y decadente.
La exposición recoge obras de artistas de primer nivel como Paul Klee, Kandinsky, Chagall, Rouault, Shiele, Kirchner o Nolde, y el recorrido artístico refleja sobre todo los cánones del cubismo, el futurismo, el expresionismo y los primeros ejemplos del arte abstracto.
Una parte de la exposición está dedicada al arte elaborado en las trincheras, porque, de hecho, muchos de los grandes talentos artísticos de la época fueron movilizados y llamados al frente, como Derain, Gleizes, Beckmann, Kirchner o el propio Apollinaire. El autorretrato del artista como soldado constituye un género especial en la pintura de vanguardia durante la Guerra Mundial.
La exposición puede visitarse en su doble ubicación del 7 de octubre de 2008 al 11 de enero de 2009.